Laura Lorena Robles Ruíz, Comisionada Estatal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Coespirisson), informó que se realizan muestreos en las 480 albercas públicas del estado, sin embargo, no se incluyen las piscinas ubicadas en fraccionamientos, ya que se consideran de propiedad privada.
“Las piscinas ubicadas en fraccionamientos se consideran propiedad privada, donde es responsabilidad de los particulares la vigilancia para cumplir con la Norma Oficial Mexicana y llevar el control de calidad”, apuntó.
La funcionaria estatal explicó que la Amiba de la Vida Libre es un protozoario presente en el suelo, agua y aire, que provoca enfermedades serias, desde infecciones en la piel y meningitis, hasta llegar al fallecimiento.
“La principal forma de transmisión es a través de zambullirse, saltar o nadar en lagos, arroyos, canales o albercas con mantenimiento deficiente, es importante aclarar que la infección no se transmite de persona a persona”, puntualizó.
Para prevenir la infección, indicó que se deben utilizar las albercas con tratamientos para el agua, con cloración y filtros; al utilizar pilas u otros depósitos para recrearse, se debe añadir cloro media hora antes de uso.
En caso de presentar síntomas de la infección después de haber tenido contacto con agua no tratada, la titular de Coesprisson comentó que se debe acudir de inmediato al médico.
Síntomas de infección por Amiba de la Vida Libre:
• Dolor de cabeza.
• Fiebre.
• Decaimiento.
• Vómito de proyectil.
• Alteraciones mentales.
• Ataques compulsivos.
• Coma y muerte en personas no atendidas.
Fuente: Comunicado.
