Uno de los aspectos más desagradables de viajar en avión es la experiencia de pasar por el control de seguridad antes de abordar: las largas filas que se forman mientras sacas de tu equipaje de mano ciertos artículos, el agente que frena la fila porque descubrió esa botella de vino o medio litro de perfume que no están permitidos, y el vuelo a punto de partir.
Respira. Hay buenas noticias en el horizonte. Tal vez no para esta temporada vacacional, pero muy pronto en muchos de los aeropuertos por los que posiblemente pases.
El gobierno de Reino Unido anunció que eliminará algunas de sus restricciones a los artículos que se pueden llevar en el equipaje de mano, como líquidos y cremas, gracias a la instalación de escáneres 3D de alta tecnología.
Por su parte, la Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (TSA), desde 2018 ha puesto a prueba estos aparatos en 15 aeropuertos, incluyendo Los Ángeles, Oakland, San Diego y Chicago, con el plan de ampliar el número de unidades en otros centros de viaje.
Si pasas por el aeropuerto de Schiphol, en Ámsterdam, ya no tendrás que separar tus líquidos ni tu portátil de tu equipaje, desde que en 2021 se convirtió en el primero de los grandes aeropuertos internacionales en instalar y poner en práctica la nueva tecnología.
Fuente: BBC