Recientemente comenzó a circular la noticia de que un equipo de astrónomos de la NASA permanecían alertas ante el peligroso acercamiento de un asteroide de 340 metros de diámetro, conocido como 2007 FT3, que registrará su punto más cercano a la Tierra el próximo 3 de octubre, pero no todo es lo que parece.
Algunos medios especularon que el cuerpo rocoso, que registra un peso de unos 55 mil millones de kilogramos, tiene la posibilidad de impactar con nuestro planeta, pero lo cierto es que se ubicará a 360 veces la distancia que hay entre la Luna y la Tierra, una dimensión enorme.
Por el momento, los cálculos realizados por los científicos estiman que el material interestelar pasará a 138 millones de kilómetros de la Tierra, por lo que por más que se desvíe de su trayectoria esto no nos afectará de ninguna manera, según informó Earth Sky.
De hecho, pasará tan lejos que incluso los telescopios de los principales observatorios del mundo no podrán detectarlo en su camino, de acuerdo con la tabla de riesgos centinela ofrecida por CNEOS (Near-Earth Object) de la NASA.
El asteroide fue descubierto el 20 de marzo de 2007 desde un observatorio ubicado en Mount Lemmon, Arizona (Estados Unidos).
Fuente: Imparcial.