Hasta la tarde del jueves avanzaba lento, pero constante el proceso de liquidación a los choferes que decidieron darse de baja de esa actividad, previo a lo que se presumía sería la liberación de las 200 unidades de transporte que permanecieron resguardadas dentro del centro pernocta desde el pasado lunes.
En el lugar hicieron acto de presencia representantes del Gobierno del Estado, quienes les comunicaron a los operadores que se efectuaban los pagos a 50 empleados que causaron baja voluntaria, pero abogados de los trabajadores del volante afirmaban que esa no era la cantidad real, pues ellos cuentan con un listado de al menos 300 que también desean ya no prestar sus servicios a la nueva empresa.
Con el paso de las horas se concretaba más la disposición de dichos vehículos, los cuales regresarían a las rutas para compensar el tiempo que perdieron los ciudadanos mientras duró esa protesta, que derivó en serios problemas de movilidad para cientos de miles de personas que a diario salen a atender diversas responsabilidades.
Se prevé que para la mañana del viernes ya estén en funciones esa cantidad de vehículos para conformar una flotilla de al menos 270 unidades que atiendan la demanda de los usuarios.
El recurso para el pago de esas liquidaciones correrá aparentemente por parte de las nuevas empresas concesionarias, pero no se tiene con exactitud cuántos de los trabajadores aceptarán sus finiquitos, pues algunos esperan recibir ciertos montos y luego volver a ser contratados.
Fuente: Gil Reyes.