Buscar nuevas fuentes de abastecimiento e instalar micromedidores para que las personas paguen lo que consuman, son algunas de las medidas que implementarán los gobiernos estatal y municipal de Hermosillo para garantizar el abasto de agua.
El gobernador Alfonso Durazo destacó se racionalizará el uso del agua y se eficientará su distribución para eliminar fugas.
“Hermosillo contradictoriamente no obstante el carácter semidesértico es una de las ciudades que tiene un consumo per cápita más alto a nivel nacional, entonces tenemos que trabajar en ese frente”, subrayó.
Asimismo, mencionó, se vio como una opción la construcción de una planta desaladora de agua en Bahía Kino o echar mano de la que pronto arrancará operaciones en Empalme, así como eficientar la red de drenaje.
Estamos trabajando en un programa que garantice el abasto de agua a toda la población para consumo humano, consumo industrial y consumo agrícola para los próximos 30 años, creo que ese va a ser el gran legado de mi Gobierno”, externó.
El tema, admitió no es fácil, pero ya hay un equipo técnico y financiero analizando las opciones para aplicarse desde ahora, mientras que a través de la Comisión Estatal del Agua (CEA) realizan acciones para salir del paso.
DE LA MANO: CANADEVI
Los desarrolladores de viviendas desde 2016 han trabajado de la mano de Agua de Hermosillo, aseguró Gustavo Villarreal Cantú, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de la Vivienda (Canadevi).
Participamos con ellos para crear las obras de infraestructura de conducción que se necesitan en la ciudad.
“Se formó la junta de Gobierno de Agua de Hermosillo y participamos en un fideicomiso donde todos los desarrolladores aportamos alrededor de 250 mil pesos por cada hectárea que desarrollamos para ir creando esa infraestructura que necesitamos para la conducción”, indicó.
Anteriormente, explicó, el organismo realizaba las obras de conducción y en la actualidad lo hacen los constructores de viviendas con ese fideicomiso de 250 mil pesos por hectárea para que esa inversión la puedan dirigir hacia las obras necesarias como: rehabilitar pozos, redes donde hay fugas o crear nuevas infraestructura para captar más agua.
Fuente: YESICKA OJEDA