HERMOSILLO.- Entre un 30 y 40% podría aumentar la probabilidad de precipitaciones pluviales en el área donde serán estimuladas las nubes en Sonora, de acuerdo con Marco Polo Martínez, encargado del Programa de Estimulación de Lluvias.
“Si nosotros nos vamos con nubes cumulonimbos, que son esas que parecen hongos, va a llover. Si nos vamos con nimboestratos, que son masas gigantes de humedad, va a llover. Nosotros buscamos incrementar el potencial de lluvia”, explicó.
Con este plan se busca beneficiar a cinco cuencas y siete presas, destacó el encargado del proyecto, para que sean los puntos de almacenamiento los más beneficiados.
Las presas son Plutarco Elías Calles, Abelardo L. Rodríguez, Adolfo Ruiz Cortines, Agua Caliente, Ignacio R. Alatorre, Rodolfo Félix y Álvaro Obregón, mientras que las cuencas son cinco, Cuenca Concepción, Cuenca Mayo, Cuenca Mátape, Cuenca Río Sonora y Cuenca Río Yaqui”, apuntó.
Se espera que en este programa sean 20 vuelos los que salgan en la temporada de lluvias, la cual tiene una duración de tres meses y que sobrevuelen el cielo sonorense para aliviar el problema de la sequía en Sonora, con un recurso cercano de 10 millones de pesos.
Alejandro Trueba Carranza, director del proyecto, puntualizó que en caso de que ser necesario se buscarán recursos complementarios para aprovechar la temporada de lluvias.
EL PROCESO
El proceso para la estimulación de lluvias se debe realizar en la base de las nubes, altura que varía, señaló Alejandro Trueba Carranza, ya que es necesaria hacerla en nubes tipo cumulonimbos o nimboestratos, o bien cualquier tipo de nube que contenga agua
El director del Programa de Estimulación de Lluvias explicó que la estimulación inicia al liberar las moléculas de yoduro de plata en la nube.
Su estructura molecular, agregó, hace que se posen en ella los cristales de hielo y de esa forma, libera energía que empuja la fusión de otros cristales en una reacción en cadena para formar una gota y después miles más, provocando la lluvia.
EN SONORA
El método a utilizar en Sonora será el de aspersión por medio de un avión, añadió, en el cual se tendrán dos depósitos, uno de ellos con yoduro de plata y el otro con el reactivo para iniciar con las lluvias.
Apuntó que una vez que se propague el producto en las nubes, se deberá de esperar alrededor de 30 a 40 minutos para que se tenga una reacción y de esa forma se tienen precipitaciones.
Trueba Carranza enfatizó que dicho producto no es dañino para la salud debido a que la cantidad de yoduro de plata es mínima y no alcanza los niveles permisibles en el agua.
Fuente: MIRNA LUCÍA ROBLES
