Ha llegado el día. Y todo ha salido según lo planeado por la NASA: Mars 2020 ya va camino de Marte. El lanzamiento se ha hecho desde Cabo Cañaveral, Florida, y ha sido a bordo de un cohete ULA Atlas 541. Si todo va según lo planeado, Mars 2020 aterrizará en suelo marciano el 18 de febrero de 2021 en el Cráter Jezero. Además, esta misió durará como mínimo un año marciano o, lo que es lo mismo, unos dos años terrestres.
Entre los objetivos científicos de Mars 2020 está "buscar signos de vida microbiana antigua, caracterizar la geología y el clima del planeta, recolectar muestras de rocas y sedimentos cuidadosamente seleccionados para el futuro retorno a la Tierra, y allanando el camino para la exploración humana más allá de la Luna", tal y como indican desde la NASA.
Además, uno los instrumentos científicos que estudiarán el planeta rojo es MEDA, una estación meteorológica desarrollada por el INTA. "Espero que todo vaya bien", ha comentado a Hipertextual Joel Pérez, ingeniero que trabajó en el INTA desarrollando uno de los sensores de MEDA, el TIRS.
"Es una misión en la que se lleva trabajando muchos años y en la que ha trabajado muchísimas personas. Solo en MEDA entre la parte científica e industrial éramos entre 50 y 80 personas. Y es solo uno de los instrumentos de Mars 2020", ha añadido. "Si llega bien, para mi será un orgullo a nivel personal, profesional y también de que se hagan este tipo de cosas en España". Aunque, recalca el ingeniero, "en España la situación de investigación y desarrollo es muy precaria". "Se hace poco, pero se podría hacer mucho más. Hay talento, pero se desaprovecha", concluye Pérez.
La importancia de ir a Marte
Pero, ¿por qué ir hasta Marte? ¿Por qué es necesario conocer el planeta vecino? La búsqueda de vida más allá de la Tierra es una de las grandes preguntas que la humanidad siempre ha querido responder. Primer, a nivel más cercano. "Eso que en su momento nos llevó a cruzar el océano con barcos de madera y explorar otros lugares, ahora también es aplicable como tema filosófico a la exploración espacial", explica a Hipertextual José Antonio Rodríguez-Manfredi, investigador en el Centro de Astrobiología (CAB) y en el INTA e investigador principal de MEDA. "La exploración del espacio surge por esa necesidad que tenemos de dar respuesta a las grandes preguntas que nos hemos hecho como si estamos solos en el universo. Pero también queremos conocer nuestro entorno, el universo", añade.
Pero Marte es un buen lugar para comenzar esa búsqueda. "Tiene unas características muy singulares, se parece mucho a la Tierra", explica. "Nuestra búsqueda de vida fuera del entorno conocido, se puede hacer de muchas formas. Pero para no buscar dando palos de ciego, tratamos de buscar vida que, sin ser exactamente la que conocemos en la Tierra porque, obviamente, eso variará, pero sí es vida que compartirá patrones químicos y características químicas como las que podemos tener en la Tierra".
"La vida que tenemos en la Tierra está altamente vinculada con unas condiciones; al agua, a unas condiciones de temperatura, a una fuente de energía... Marte se encuentra en un entorno de nuestra estrella en la que esas características, tanto a nivel de energía que llega del sol como la que viene del suelo -aunque cada vez haya menos-. Es un entorno muy conveniente para que haya podido haber vida allí. También sabemos que hubo agua", añade el investigador.
En resumen, Marte tiene unas condiciones altamente probables de que hubiera podido haber vida allí. Si bien no son las condiciones ideales, ya que ahora es muy árido, pensamos que en su momento pudiera haber habido vida. Incluso quizás ahora pueda haber vida en el subsuelo.
Por todo esto, además de por su cercanía -"solo hay que recorrer unos 500 millones de kilómetros para llegar"-, es un "excelente candidato". Aunque el planeta más cercano sea Venus, la realidad parece ser que sus condiciones son "peores". Mientras que Marte puede "pueda ser un sitio al que podamos ir, al que podamos recurrir ya sea para tener estaciones permanentes allí o para ir a sitios más lejanos", añade el investigador de MEDA.
Hope Mars y Tianwen-1 ya van camino de Marte. Por lo que Mars 2020 es la tercera misión en apenas dos semanas que pone rumbo al planeta vecino, ¿por qué hay tantas misiones que salen estos días?
"Las oportunidades de llegar a Marte ocurren cíclicamente cada dos años", explica desde el otro lado del teléfono el investigador principal de MEDA. "Cuando hablamos de ventana de lanzamiento significa que las posiciones de los dos planetas son de máxima cercanía entre la Tierra y Marte".
"Cuando nos planteamos misiones esperamos que cada dos años esas condiciones sean las adecuadas para no tener que consumir muchísima energía en llegar. Se podrían enviar los cohetes en cualquier momento, es cuestión de gasolina y que tardemos 25 meses, por ejemplo. Perseguiríamos al planeta hasta llegar, gastando gasolina por el camino", apunta. "Pero desde un punto de vista óptimo, de eficiencia, esas condiciones se dan aproximadamente cada dos años, para que el viaje dure entre siete y nueve meses. Y finalmente llegue con un consumo de energía relativamente bajo", concluye el investigador.
Esta es la tercera misión camino del planeta rojo este año. Pero cada vez que se abra la ventana de lanzamiento a Marte será una oportunidad más para enviar nuevas sondas, rovers y otras herramientas que nos ayuden a conocer mejor el planeta vecino.
Fuente: Hipertextual