México.— Fruto del trabajo de investigación, depuración y redacción de más de 40 años, México tiene el más robusto diccionario propio de la lengua española, el cual cuenta con un total de 32 mil 650 artículos lexicográficos o palabras, que engloban aproximadamente a 90 mil acepciones.
Se trata de la segunda versión, todavía en formato electrónico y consultable en Internet, del Diccionario del Español en México, y que como su nombre lo dice hace referencia a uno de los idiomas que se hablan en el país e incluye modismos, regionalismos, caló, palabras altisonantes o groserías e incluso las palabras que cuentan con raíz de alguna lengua originaria o proceden directamente de ellas.
Francisco Segovia, corrector y redactor que forma parte del equipo de trabajo de dicho proyecto, explicó que esta segunda versión, por ahora todavía disponible solamente por medios electrónicos, pero de la que esperan tener pronto una edición impresa, es fruto del trabajo de un equipo de ocho especialistas.
Durante un taller impartido a periodistas en la sede de El Colegio de México, el también poeta hizo un recorrido por la historia del diccionario, destacando que para el primero se tomó en cuenta el uso del español en el país desde el fin de la Revolución mexicana, en 1921, y hasta 1973. Para esta segunda edición, continuó, se partió de la última fecha y abarca hasta 2018 y es el que actualmente se puede consultar en Internet (dem.colmex.mx).
Para su elaboración en ambos casos, se reunió un corpus que entrecruzó el léxico utilizado en libros de autores mexicanos e impresos en el país con palabras que los habitantes de México utilizan en la vida diaria. Para esto último se utilizaron tecnologías modernas que lo hacen posible, como podcast y grabaciones de los medios de comunicación a lo largo y ancho del territorio nacional.
Todo ello fue introducido a un sistema de cómputo que permitió conocer formas de uso, modismos y regionalismos del español en el país, lo cual las personas pueden consultar en el sitio en Internet del diccionario, mismo que tiene productos extra como la procedencia de cada palabra, otras acepciones e incluso conocer la parte del corpus bibliográfico y lingüístico del que fue sacada la información, lo que permite una rica experiencia para gente común o especialistas.
NTX/RML/MBS
Fuente: Notimex