“La madurez es la capacidad de cosechar sin disculparse ni quejarse cuando las cosas no van bien”... Jim Rohn
Una buena dosis de nivel político debe haber en la relación que se ha entablado entre el Presidente AMLO y la Gobernadora CPA, que permite transitar en la incipiente y siempre asfixiante política centralista que ya ha quedado más que definida por el gobierno federal actual en el poco tiempo de su vigencia, a la que, por otra parte, algunos estados y municipios empiezan a rechazar, principalmente aquellos gobernados por Acción Nacional.
En este contexto la Gobernadora ha sido ecuánime, empática y muy respetuosa de la figura presidencial, lo cual también puede decirse del Presidente hacia ella, quien además no escatima una caballerosidad y deferencia notorias hacia la mandataria, por lo que puede afirmarse que entre ellos no ha pesado la definición partidista para el trato institucional obligado, ni cerrado las puertas para la interacción positiva, esperemos, a favor de los gobernados por ambos.
Es un hecho que no resulta sencillo para todos adaptarse a nuevas formas, sin embargo, Claudia Pavlovich ha dado muestras concisas en estos meses de entender las bases de la política y la diplomacia que obligan a acercar los extremos para generar lo posible, así las condiciones luzcan desfavorables como nunca antes.
Esto a cuento por la inminencia de los efectos de un recorte presupuestal brutal que se avecina para 2020 al que le podemos acreditar la falta de una mayor exigencia por parte de los legisladores federales y senadores que lamentablemente dejaron ir la oportunidad de servir a los sonorenses, abanicando la recta para defender lo que ya teníamos, ya no digamos para incrementarlo.
Tal vez esto tenga mucho que ver con la novatada de no pocos de ellos, que se ven de pronto a un nivel de representación que requiere toda una ruta de experiencia y construcción política para realizar una interlocución efectiva en los consensos presupuestales, cuyo resultado en este caso, no resultó como debía, abriéndose entonces un enorme boquete que ahora hay que buscar compensar en alguna medida en lo local y en el propio plano federal.
El caso es que, ante ese escenario adverso en materia financiera, lo que no se refleja en el presupuesto se refleja en la política y la Gobernadora ha optado por la ruta diplomática estableciendo una interlocución institucional de muy buen nivel y ajustada a la nueva realidad en la cual, la Presidencia a su vez hará política con los estados al menos en tres canchas para una colaboración amplia que le ayude a la gobernabilidad en primera instancia y de ahí en adelante, todo lo que sea posible con quien sea posible; finalmente Presidente de todos los mexicanos, como lo sostiene el propio AMLO, que vaya que ha dado muestras de conocer lo suyo, la política, y que sabe que la liga se estira lo más posible, procurando que no se reviente, así como que la cobija debe alcanzar para todos.
Bytheway
Otro regalito legislativo para 2020, es la negativa a la legalización de los automóviles “chuecos” que deja al margen de afianzar su patrimonio a cientos de miles de propietarios de estas unidades que nuevamente la verán pasar, sin que sus representantes de las “pafas” hayan dado muestras de vida para incidir en el proceso, de la mano con los legisladores y senadores. Entre estos últimos y los primeros, ahí los van a hallar las guerreras buscadoras próximamente en algún yunque.
La gira del fin de semana, además de las anécdotas sagrada y de periodistas siniestrados, no dejó grandes aportes al bienestar de los pueblos indígenas visitados por el santo varón que viniera a estas profanas tierras a pontificar su legado de paz y amor. Promesas si, compromisos tal vez, pero en constante y sonante, parece que no sonó la registradora.
La disculpa de la Gobernadora por la imprecisión quirúrgica en que incurriera en su mensaje a la nación Seri, creo que no era del todo necesaria, aunque políticamente ineludible, por su naturaleza involuntaria y el estrecho margen fonético que la facilitara; sin embrago la apenada dama hizo lo propio con humildad y estatura, independientemente que lo realmente destacable, es el haber planteado el acuerdo con el Presidente para la elaboración de un proyecto que haga llegar el agua potable a esta tribu que se las ha ingeniado hasta ahora para sobrevivir sin la facilidad del vital líquido y sus accesorios, que para nosotros son parte de la naturalidad cotidiana.
Hace cuentas el Diputado Gildardo Real y la cifra resulta alarmante, respecto de un monto de alrededor de 4 mil millones de pesos consistente en recortes al presupuesto del estado que, a la hora de las cuentas, redundará en recortes a aquello que no se podrá atender o resolver.